lunes, 2 de marzo de 2020

Introducción a los modos de organización de las clases de palabras

Las clases de palabras que, seguramente, conocemos todos como sustantivos, adjetivos, verbos, etc., se organizan, a su vez, en grupos generales que las contienen, de acuerdo con algún rasgo en común. Las distintas clases de palabras, entonces, se organizan en distintos grupos, que son los que vamos a enumerar a continuación:

Clases de palabras léxicas


Son palabras léxicas las que tienen significado propio y que pueden ser núcleos de los sintagmas en los que participan junto a distintos modificadores. Se incluyen aquí: sustantivos, adjetivos, verbos, adverbios y preposiciones. En el próximo punto daremos cuenta de cuáles son las propiedades y formas de comportamiento que tienen cada una de estas clases.

Un ejemplo de este grupo de clases de palabras puede ser el sustantivo patio, que tiene un significado propio en el que se incluyen rasgos semánticos como: espacio físico, al aire libre, generalmente en la parte trasera, perteneciente a una casa.

Clases de palabras funcionales


Son funcionales las palabras que no tienen significado propio, pero que contribuyen a conformar relaciones de significado a partir de su participación en sintagmas en los que intervienen palabras léxicas. Ubicamos aquí a dos clases: los determinativos y las conjunciones.

Un ejemplo de estas clases de palabras puede ser el artículo (un determinativo), que comprende a palabras como: el, la, los, las, un, una, unos, unas. Estas palabras no significan nada por sí mismas, pero sí pueden contribuir a identificar a qué nos referimos con un sustantivo común. De esta manera, cuando nos encontramos con la frase El portero, comprendemos que se habla de un portero único de un determinado lugar o, en todo caso, de uno que ya conocemos o del que ya estábamos hablando. Sin embargo, si se cambia el artículo por otro, como en Un portero, comprendemos que estamos hablando de uno de varios porteros que hay en el lugar al que nos estamos refiriendo. Como podemos ver, ni las palabras el o un tienen significado, pero sí nos permiten crear el significado particular que asumen las expresiones lingüísticas en el texto del que participan.


Pronombres


El grupo de los pronombres contiene a una sola clase de palabras cuyas características principales son dos: no tiene significado (lo que lo asimila a las palabras funcionales), pero se comporta como una palabra con significado (lo que lo asimila a las palabras léxicas). Es decir, es una palabra funcional de comportamiento como léxica, y esto es lo que no nos permite ubicarlo en ninguno de los dos grupos anteriores.

Los pronombres centrales o prototípicos son los que conocemos como las personas gramaticales: yo, vos, él, ella, nosotros, nosotras, ustedes, ellos, ellas. En una oración como Ella leía una novela francesa, el pronombre ella cumple la función de sujeto de la oración, que es la que le corresponde al sustantivo. Ella, como palabra, no significa nada, pero en la oración ella puede estar sustituyendo a una persona expresable a través de un sustantivo, como María, o a través de un sintagma con sustantivo núcleo, como la hermana de Juan: María leía una novela francesa o La hermana de Juan leía una novela francesa. Así, podemos ver cómo el pronombre ella, que no tiene significado propio y, por tanto, es funcional, cumple una función que le corresponde al sustantivo, lo que lo hace estar comportándose como una palabra léxica.


Interjecciones


Una sola clase forma este grupo aparte, y es la de las palabras que definió el gramático Alarcos Llorach (1999) como una clase de palabras autónomas que no cumplen una función dentro de la oración sino que forman, ellas solas, enunciados independientes. Es decir: a diferencia de las palabras léxicas o funcionales, e incluso del pronombre, que cumplen funciones dentro de sintagmas que forman la oración, las interjecciones forman, solas, una oración completa e independiente. El ejemplo más fácil para comprenderlo, la siguiente oración que está formada solamente por una interjección: ¡Ay!


Como podemos ver en todo este punto, los grupos de clases de palabras están formados por sus características en relación con el significado y con su funcionamiento. Así, las palabras léxicas y funcionales se distinguen por su relación con el significado: las léxicas lo tienen y las funcionales no; el pronombre se caracteriza por su funcionamiento similar a las léxicas pero su falta de significado propio lo asemeja a las funcionales, y las interjecciones se distinguen por su funcionamiento en soledad, como una oración completa en sí misma, sin una función sintáctica en relación con otras palabras.



No hay comentarios:

Publicar un comentario